Nuestros cursos de Reiki están distribuidos en 3 etapas, al igual que lo estamos nosotros como seres humanos. (Una capa física, una mental/emocional, y una energética), para que cada uno pueda despertar, transformar y dominar todo el potencial que se encuentra dormido en su interior.
Despertar y abrir los ojos a nuevas realidades. Reconocernos a nosotros mismos como lo que somos realmente y empezar el camino hacia la transformación personal y colectiva, para aprovechar todo el potencial que tenemos dormido. Cuando la energía circula correctamente por el cuerpo, se experimenta una sensación de plenitud indescriptible.
El arte de la Transformación es la clave para vivir en armonía. Es aprender a convertir los problemas en oportunidades, rompiendo las barreras del tiempo y el espacio y aprendiendo a gestionar o transformar las emociones que nos impiden avanzar, para que nada nos perturbe y así mantener el equilibrio interno.
Dominar cuerpo, mente y energía, es el reto del maestro. La maestría interior nos permite vivir alineados con nuestro propósito de vida, lo que implica vivir con pasión, en equilibrio y armonía. Además de tener una mayor capacidad para canalizar energía y utilizarla en beneficio de todos.
La enseñanza de Reiki es transmitir o compartir la esencia de la vida con el mundo. Convertirse en maestro instructor, es una gran responsabilidad y un compromiso de vida, ya que se enseña con el ejemplo y no con la lengua.